Nueva etapa y nueva estructura organizativa y de curaduría
Por primera vez y de manera compartida, el festival Sâlmon ha sido impulsado por cuatro centros de creación de artes vivas de Barcelona: Antic Teatre, La Caldera, el Graner y La Poderosa asumieron de manera conjunta la novena edición, en un momento crítico para la cultura. El modelo de organización, horizontal y colectivo, surgió de la voluntad de contribuir, por un lado, a la estabilidad de un sector frágil como el de las artes vivas y, por otro, a luchar contra la precarización agravada por la crisis actual.
Asimismo, y también por primera vez, los centros de creación impulsores del Sâlmon 21 decidieron pensar el festival de manera conjunta con un equipo curatorial que se encargarse de la programación y la conceptualización tanto de las ediciones de 2021 y 2022, como de la programación sostenida durante todo el año 2021. El equipo curatorial son Sofía Asencio, Bea Fernández, Ariadna Rodríguez e Iñaki Álvarez. Se incorporó también al Festival un rol de mediación artística y organizativa, que asumió Dianelis Diéguez, gestora cultural.
El festival, que cambió de web y pasó a alojarse en festivalsalmon.com, sigue contando con el apoyo del Ayuntamiento de Barcelona (Instituto de Cultura de Barcelona) y con la estrecha colaboración del Mercat de les Flors y Fabra i Coats – Fábrica de Creación.
Edición 2021, del 17 al 21 de febrero: artes vivas y experimentación con el formato televisivo
La edición 2021 comenzó el 1 de febrero con un laboratorio de tres semanas en el que cinco artistas experimentaron conjuntamente alrededor del formato televisivo en la Fabra i Coats: Fábrica de Creación.
El laboratorio, punto de partida de la edición de 2021, dio paso a cuatro días de programación en un espacio abierto en la Sala MAC del Mercat de les Flors concebido como plató, diseñado ex profeso y con público en directo, que acogió propuestas de diferentes códigos y duraciones, siempre con la idea del directo como propio de las artes vivas y dialogando con el formato magazine televisivo.
Se generó un programa con diferentes secciones que no pretendió reproducir dinámicas de la televisión convencional, sino entender este espacio como una posibilidad para romper jerarquías entre formatos, géneros, disciplinas, alta y baja cultura o ficción y documental.
La programación dialogó con piezas escénicas que se vieron en la Sala Pina Bausch del Mercat de les Flors. Sin perder de vista las artes vivas como puntal del directo, la experimentación con el formato televisivo propició que el festival se expandiera por diferentes pantallas y formatos audiovisuales (streaming web y emisión por betevé). Telenoika, comunidad audiovisual que aglutina artistas interesados en la experimentación, se encargó de la realización, y el estudio Soon in Tokyo se encargó de la imagen del festival.
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